Estancia Corta

Una película de Emilio Bermeo y Santiago Oviedo

El Pikero, un pequeño hostal frente al mar, fue un día el principal sustento de la familia

Cedeño. Hoy ya no es lo que era; cuando los turistas extranjeros empezaron a escasear, los Cedeño Velasco, una familia conformada por dos padres y tres hijos adultos, se vieron obligados a diversificar sus esfuerzos y buscar suerte en otros negocios. Actualmente toman turnos para administrar y cuidar el hostal: un solo miembro de la familia se hace cargo, apoyado por la ayuda de jóvenes voluntarios y la compañía de Casimiro, un perro ciego que habita la mayor parte de sus días al interior del Pikero.

Este modesto hostal, hoy venido a menos, delimita el mundo de Estancia Corta. Sus 10 Habitaciones, las áreas de acceso exclusivo para el personal y las zonas comunes son los lugares desde donde se observa a los diversos personajes que habitan el Pikero.

Surfistas, mochileros, comerciantes y familias de paseo conviven con los responsables del hostal en un espacio donde la escasa privacidad marca las dinámicas entre los que allí habitan.

Durante cuatro meses –entre los que transita el cambio de temporadas– la cámara revela la transformación que supone la llegada de huéspedes, la vida cotidiana dentro del hostal y la lucha por sacarlo a flote.